El turista

El  turista se encuentra con un monje en meditacion y se queda impresionado por la felicidad y la paz que le inspira. El turista le pregunta: "¿Como es que usted que ha renunciado a todo en el mundo, esta en paz y feliz como si lo tuviera todo?, ¿en que radica su capacidad de renuncia?". El monje se sonrio y dijo: "Tambien yo me asombro de la capacidad de renuncia de los hombres del mundo. Yo solo renuncio a cosas perecederas por tesoros de valor infinito, mientras ellos renuncian a lo infinito por cosas perecederas". -Jorge Nardi-

(Los verdaderos tesoros son: prudencia, justicia, fortaleza y templanza; virtudes cardinales que predisponen a los dones del espiritu: sabiduria, entendimiento, consejo, fortaleza, paciencia y temor de Dios; para recibir las virtudes teologales: fe, esperanza y caridad; y los consiguientes frutos del espiritu, anticipo del cielo o mera gracia: caridad, gozo, paz, paciencia, longanimidad, bondad, benignidad, mansedumbre, fidelidad, modestia, continencia y castidad. Tesoros que envidian... ¡tanto acaudalados como espiritualistas!)