lunes, 1 de septiembre de 2014

Primero lo primero

Uno de los errores más claros de la modernidad es querer hacerse de "una familia propia", es decir destinarles a los amigos desde temprana edad esa función.

Yo he escuchado decir muchas veces: "a la familia propia no se la elije", con caras largas e intención de algún supuesto cinismo e ironía. Lo cierto es que a la familia propia sí podemos elegir honrarla.

Esta ingratitud, esta soberbia también se manifiestará naturalmente en las familias de los demás: quién habla así de su propia familia, cuánto le importaran las ajenas, ¿no?. Y por supuesto: sobre la que formemos.

Ya desde adolescentes despotricamos contra la nuestra, contra quienes nos han brindado una cara educación, entre tantas otras cosas. Decimos: "los amigos son lo primero", y este es un error esencial de la Modernidad.

"Las parejas son primero", y sobre ellas construímos familias falsas, es decir familias sin el sustento de honrar a la original.

TE ALIENTO pues a que sepas identificar que "primero es lo primero", formando una familia sobre bases y no sobre cenizas.

Es imposible, en realidad,

construír sobre cenizas
en vez de sobre bases.

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