Hay muchas personas "llenas de nada", digámoslo así. Es mal de la modernidad.
Por accidente, por moda, por presión social, etcétera, muchas personas salieron de la secundaria pensando: "estuvo mal". "Estuvo mal", "fue todo erróneo", ahora voy a ser "moderno" y ser realmente adulto. Ese momento épico, mítico, quedó.
Hoy tenemos personas con décadas de esto; ¡décadas!. Personas "adultas" "llenas de nada", ¡y convencidas!. Han perdido años de vida sintiéndose muy modernas. Años de adquirir verdadero conocimiento, honrar los valores y progresar.
Tenemos hoy, décadas después, personas relativas, inmorales... volcadas a muchos vicios. La mentira, el desprecio al conocimiento, y vicios más comunes y típicos. Presienten que algo "no les cerró", digamos. Y hacen uso de todo cuanto pueden...
"Llenas de nada", pero llenas también de mentiras, errores, y auténticas falacias. Hacen malabares en lo mental, social y espiritual. Mientras otras quizás tontas, ahondaron en valores, en buen proceder, y buenas costumbres. Mejores cabezas y almas.
Mientras muchas personas tienen décadas
de ser "Modernas" (llenas de nada);
otras quizás tontas ahondaron
en valores, buen proceder
y buenas costumbres:
mejores cabezas y almas.
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